Esta sección está dedicada a compartir opiniones sobre prácticas dentro del campo, redactado por el lector, las imágenes y el conocimiento aquí plasmado, son de la autoría y experiencia de quien redacta; puede encontrar sus datos al finalizar.
Uso de drones en la Agricultura
Según la RAE lo define como “aeronave no tripulada”, es decir funciona por control remoto. También puede aparecer escrito como RPA (Remotely Piloted Aircraft).
Dentro del sector agrícola, el drone puede acompañarnos en un gran número de tareas, pero en específico hablaré del fumigador o aspersor.
Actualmente, la agricultura atraviesa por uno de los retos más complicados para cumplir con las leyes de protección ambiental, más si es algún producto para exportación; además de cubrir con los requerimientos de abastecimiento en el mercado que es cada día más competitivo. Por lo tanto, se ha convertido en uno de los sectores que más requiere desarrollar nuevas tecnologías para acelerar tareas como la fumigación. Para esto se ha implementado la inclusión de los drones para llevar a cabo esta tarea, ya que el tiempo en la que se cubre una hectárea es muy rápido, aunado a que reduce drásticamente el uso de agua para esta actividad. La fumigación es un proceso de suma importancia, ya que permite controlar los las plagas, malezas y enfermedades que pudieran provocar grandes pérdidas y en caso extremo, la perdida de los cultivos, por lo cual el productor invierte gran parte de su tiempo y dinero en la realización de estos trabajos. Esta necesidad fomenta día a día el ingenio nacional e internacional en la producción de drones fumigadores para el sector agrícola con las más novedosas características y accesibilidad tanto para grandes como medianos y pequeños productores.
La rapidez es sin duda una de las mayores ventajas del uso de drones fumigadores, destacando el hecho de que los productores no se encuentran directamente en contacto con los productos que en varias ocasiones pueden ser extremadamente tóxicos para la salud. Esto evita en gran medida los riesgos de intoxicaciones involuntarias, que en el pasado podían llegar a ser fatales, sobre todo en personal no entrenado o con poca sanidad e inocuidad. Por otra parte se tiene ahorro de agua y evita la deriva del mismo producto; evita la lixiviación del producto ya que al momento de la aplicación por ser gota fina se absorbe casi al momento y como no se lava el producto en la planta, no se va a los mantos acuíferos.
Se ha comprobado que el empleo de drones fumigadores disminuye los costos en la producción agrícola, incluso llega a incrementar la productividad del agricultor hasta un 30% ya que se aprovecha casi al 100% el producto aplicado; reduce el uso de combustible que anteriormente empleaba la maquinaria pesada encargada de ese proceso por lo que no existe tanta contaminación como con tractor u avioneta. Dicha maquinaria compacta el terreno de cultivo y puede dañar algunas plantas.
Los drones fumigadores son fácilmente configurables en modos de trabajo manual, dirigidos por controles remotos en tiempo real. De igual modo, se configuran para trabajos automáticos en zonas específicas y en una hora acordada, mejorando así la eficiencia y la calidad de las aplicaciones químicas al cultivo con vuelos a muy poca distancia de las plantas.
El uso de drones fumigadores ¿Tendrán desventajas? Sin duda, la primera de ellas es que este equipo debe ser manejado por una persona certificada, con capacitaciones, cursos, horas previas de vuelo y práctica para el uso y aplicación, además de ser acompañado de un ingeniero agrónomo para dar asesoría técnica antes del momento de la aplicación, para preparar las mezclas con experiencia en el uso de agroquímicos para evitar percances y accidentes como la precipitación y la no disolución de los productos a usar.
El drone a comparación de una aplicación con aspersora de tractor o pulverizadora autopropulsada, el uso de agua es realmente nada, una aspersora normal es de 400 – 600 litros, hasta las pulverizadoras de capacidad hasta de 4000 litros, esto quiere decir que ahorramos agua, evitamos lixiviación además de que no se va una sola gota de agua a los mantos acuíferos, así como evitamos el daño mecánico que provocan estos grandes implementes, sin hablar de el combustible que utilizan estos.
Por otro lado, en comparación a las aplicaciones con mochila, ya sea mecánica o de motor, la aplicación con drone es homogénea y uniforme, ya que para poder realizar aplicaciones con cualquier de las dos mochilas se utiliza personal humano y depende de la altura del mismo, fuerza, edad y de las condiciones del suelo como de la lejanía de la parcela, así como si longitud de la misma, por eso y muchas cosas más, una aplicación con drone es benéfica, además de que puede aumentar nuestra producción hasta en un 30% con condiciones idóneas.
Mi experiencia como piloto y estudiante de agronomía en el uso y pilotaje de Drones.
En el tiempo que he fungido como piloto de drones agrícolas me he encontrado con muchas experiencias que te van forjando como agrónomo y al mismo tiempo como piloto. Desde mapas complejos (parcelas muy irregulares y árboles tanto en medio como alrededor de ella, como muchos obstáculos en general), lugares sin acceso al pie de la parcela, campesinos que aún no creen en las aplicaciones con drone, incrédulos porque solo se utilizan 10 a 12 l/ha; ha sido un verdadero reto ser uno de los precursores de esta tecnología en mi área de trabajo (La Piedad, Numeran, Pénjamo), así como las diversas fases que este trabajo o actividad te hace desarrollar.
Para dar un buen servicio con la aplicación, cuento con un drone con capacidad de 20 litros, pero por la altura en mi zona de trabajo (aproximadamente 1,750 a 2,200 m.s.n.m.), descontamos de 1.3 a 1.5 L por 1,000 de altitud, así que nuestra capacidad máxima sería de 15 – 16 L. Para el uso eficiente de las pilas se utiliza una carga de 10 L, pero con 1 L extra para cualquier emergencia. Configurando el drone se cumple a la perfección una formula sencilla que es: Pila + Carga = Hectárea, quedándonos pila suficiente para traerlo al lugar de despegue para volver a cargarlo y seguir haciendo nuestro trabajo hasta completar la superficie de la tabla total, pero para ser más técnico les platicaré con que cuenta un drone agrícola y sus componentes importantes para el conocimiento básico del equipo, así como unas breves descripciones para dar un ejemplo de cómo funcionan.
El tanque (contenedor), de capacidad hasta de 20 litros, es del mismo material y muy similar a una mochila aspersor manual que todos conocemos, aforado y con todo lo necesario para una correcta aplicación.
Para finalizar, en este nuevo mundo de las aplicaciones con drone agrícola, se tiene que fungir no solo de piloto sino también de agrónomo o hasta jornalero; debes estar dispuesto a estar todo el día en campo, a veces con sombra, a veces en el sol, en ocasiones cerca de una localidad con tiendas, en otras lejos donde no tienes ni donde conseguir agua para beber, ni dónde comer, son algunos sacrificios, pero eso sí, te aseguro que el volar un drone agrícola es una nueva pasión en la cual te envuelve por completo, una actividad muy linda que es muy diferente a las demás, bien remunerada, que te da estatus y currículo como estudiante de agronomía, una actividad que se vuelve una manera de despejarte y que incluso después de tiempo no se ve como trabajo, se convierte en una actividad que como ya dije, te genera pasión, te remunera y te llena de contactos muy importantes, donde también formas parte de una comunidad que cada vez se va dando a conocer más.
Autor: Miguel Ángel Corona Cortes
Correo: mcc70951@udelasalle.edu.mx
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