Una nueva versión del Tratado de Libre Comercio entre la Unión Europea y México (TLCUEM) no será suficiente para lograr la diversificación de los destinos de las exportaciones mexicanas, en el corto y mediano plazos.
El sábado pasado el gobierno mexicano anunció el fin de la renegociación del TLCUEM, una vez que este quede aprobado en los congresos de ambas partes y firmado por los jefes de Estado, productos agroalimentarios de México como jugo de naranja, atún, miel, jarabe de agave, frutas y vegetales podrán exportarse a la Unión Europea libres de aranceles.
Esto incrementará las opciones de México para el envío de frutas y hortalizas, el cual se concentra en Estados Unidos. No obstante para aprovechar al máximo el potencial de este mercado, es necesario mejorar las condiciones logísticas para la distribución de alimentos, pues esta requiere de transporte y almacenamiento en frío o congelado, coincidieron representantes del sector privado.
“Hay grandes oportunidades para productos como berries y jugos, por lo que consideramos importante impulsar acciones para aumentar el volumen de los envíos, crear un puente aéreo para estos productos y así reducir los costos para la transportación”, explicó Juan Pablo Castañón, presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), en conferencia telefónica con medios.
Al aumentar los volúmenes de exportación con productores organizados en grupos, se pueden obtener costos más accesibles para la transportación en frío, y así ofrecer precios más competitivos en la Unión Europea, dijo por su parte Fernando Ruíz, director del Consejo Empresarial Mexicano de Comercio Exterior (COMCE).
La renegociación del TLCUEM, inició hace dos años, con la expectativa de diversificar el destino de las exportaciones mexicanas. Información del Banco de México refiere que en 2017 el 80% de los envíos mexicanos tuvo como destino Estados Unidos, mientras que el 5.6% se vendió en la Unión Europea.
De acuerdo con Ruiz el mayor potencial para el comercio con la Unión Europea se encuentra en el sector alimentario.
Como parte de las ventajas para la exportación de estos productos, el director del COMCE refirió que la actual ampliación del puerto de Veracruz abonará al manejo de alimentos para la exportación, pues será una terminal especializada para este tipo de mercancías. También ayudará la ampliación de los puertos de Altamira y Tampico.
El presidente del CCE explicó que el sector de lácteos mexicano quedó enunciado, en la nueva versión del Tratado, como sensible, por lo que los productos lácteos europeos no entrarán libres de arancel de manera inmediata al mercado mexicano.
Frente a esta disposición, dijo, los productores en México deben trabajar en acciones para la investigación y en aumentar su producción.
Más historias
Impulsan tecnificación de 200,000 hectáreas de riego en México
Innovación agrícola: Lark Seeds deslumbra en Expo AgroAlimentaria Guanajuato 2024 con la presentación de su programa de chiles picosos y pepinos
Sinaloa busca soluciones ante la sequía prolongada