El producir plantas de cualquier tipo resulta difícil cuando se realiza a cielo abierto ya que se tienen un sinfín de variables ambientales que afectan el desarrollo, debido a estas condiciones en la mayoría de las ocasiones solo se produce una vez al año, bajo esta limitante se diseñaron y conformaron los sistemas de producción hidropónica que hoy en día se manejan, los cuales no tienen una dependencia directa con el clima, gracias a este motivo se produce todo el año cualquier especie de plantas de tipo herbácea o semi-leñosa (hortalizas, flores y frutillas),esta ventaja reside en la capacidad de sostener mecanismos que propician las condiciones ambientales que la planta necesita.
La hidroponia es una subdisciplina de la hidrocultura, y es un método para cultivar plantas mediante el uso de soluciones de nutrientes minerales en agua, sin suelo. Investigadores, en el siglo XVIII, descubrieron que las plantas absorbían nutrientes minerales esenciales en la forma de iones inorgánicos desde el agua. En condiciones naturales, el suelo funciona como un reservorio de nutrientes, pero el suelo en sí mismo no es esencial para el crecimiento de las plantas, prácticamente cualquier planta terrestre puede ser cultivada por hidroponia. Recientemente la hidroponia ha sido usada para mejorar vegetales y proporcionarles mayor valor nutricional.
El valor del mercado mundial de los alimentos producidos por hidroponia ha venido creciendo a una tasa de crecimiento anual compuesta de un 6.5% durante el periodo del 2013 al 2018.
Han surgido varias razones del por qué la hidroponia está siendo adoptada en el mundo para la producción de los alimentos, a continuación mencionaremos algunas de ellas:
- No se requiere suelo.
- El agua se mantiene en el sistema y puede ser reusada, disminuyendo así el consumo de este tan importante recurso.
- Es posible controlar los niveles de nutrientes completamente, disminuyendo de esta manera los requerimientos de los mismos.
- No se produce contaminación por liberación de nutrientes al ambiente, esto debido al sistema controlado, y al uso no excesivo de herbicidas o pesticidas.
Debido a que los problemas de plagas se ven reducidos, y a que los nutrientes están siendo constantemente alimentados a las raíces, la productividad en la hidroponia es alta, aunque el crecimiento de las plantas puede estar limitado por los bajos niveles de dióxido de carbono en la atmósfera, o la baja exposición a la luz.
Para finales del 2016, el mercado global de alimentos estaba valuado en $4.2 billones de dólares. Los alimentos frescos y los productos agrícolas constituyeron un 52.6% de esta figura, mientras que los alimentos envasados contribuyeron al resto. Durante el periodo de cinco años anteriores al 2016, el sector alimentario se expandió a una tasa de crecimiento anual compuesta de un 3.7%.
El rápido crecimiento económico en la última década, junto con el aumento de la población, ha impulsado el consumo de alimentos. Una gran parte de este crecimiento ha sido inducido por el aumento en la prosperidad de mercados emergentes, que se han expandido más rápido que sus contrapartes en el mundo.
El mercado de alimentos en el mundo alcanzó los $5.3 billones de dólares para finales del 2017. El fuerte crecimiento de los ingresos per cápita, y la rápida urbanización, son los responsables de este impulso en el mercado global.
La concentración en la industria hidropónica es baja. Los dos jugadores más grandes se benefician al manejar sus propias redes de distribución y acuerdos de mercadotecnia, lo que les ha permitido incrementar su participación en el mercado durante los últimos cinco años. Sumado a esto, sus retornos han atraído la atención de grandes capitales privados, y administradores de fondos de cobertura, que los han ayudado a acceder a préstamos para financiar su expansión.
En contraste, el resto de la industria está compuesta por pequeñas operaciones. La demanda por parte de los consumidores ha ayudado a incrementar las ganancias de estas pequeñas operaciones, pero su participación en el mercado es muy limitada debido a su capacidad productiva, las restricciones para su distribución, y la demanda localizada. La concentración de la industria se mantendrá estable durante los próximos cinco años, a medida que la expansión de las firmas más grandes se vea mitigada por la demanda creciente de alimentos producidos en forma local.
La agricultura es un sector muy conservador con mucha inercia y barreras al cambio, donde los métodos “tradicionales” persisten, no obstante, los impulsores de la transformación están siendo cada vez más convincentes. El movimiento hacia una agricultura más segura está surgiendo ya en todo el mundo, y el cultivo sin suelo está liderando este crecimiento.
La población mundial alcanzó recientemente los 7 mil millones de personas, y se proyecta que pasarán los 9 mil millones para el 2050. Cada vez más iremos aumentado los residentes de este planeta, al mismo tiempo, nuestro paradigma alimentario dominante se está resquebrajando: cambio climático, mayores sequías, degradación de suelos, enfermedades, exceso de fertilización, escasez de fósforo, contaminación del agua, sobrecarga de químicos, destrucción de polinizadores, y pérdida de biodiversidad, todos amenazan nuestro enfoque “tradicional” de producción de alimentos. En reconocimiento de estos problemas, los consumidores y vendedores detallistas, están demandando cada vez más alimentos de mayor calidad y más sanos, con un menor impacto sobre nuestro medioambiente.
La hidroponia es una tecnología y práctica agrícola que puede ayudar a alimentar a las ciudades en el futuro, al tiempo que cumple con las demandas de los consumidores y asegura la buena salud de los sistemas ecológicos.
Más historias
¡Estuvimos presentes en Dekalb en Rosa!
Infoagro Exhibition México realiza la presentación global de su segunda edición en Fruit Attraction, en España
Nueva aplicación de Corteva Agriscience de Súper Ganadería