Uno de los motores en la economía en nuestro estado de Sinaloa es la producción agrícola, además de que presenta un área de oportunidad de empresas comercializadoras, jornaleros, proveedores, entre otros.
Muy pronto el sur del estado de Sinaloa será abastecido de agua por medio de canales de irrigación y de esta manera potencializar un detonante más, tiene ya una fecha para que esto se lleve a cabo, el momento justo para que las miradas volteen a esa región del estado que sin lugar a dudas logrará posicionarse en el gremio agrícola.
Con esperanza y gran energía humana aplicada, es como se está trabajando arduamente en el sur del estado de Sinaloa para lograr culminar el compromiso contraído de entregar los dos nuevos almacenamientos de agua que tendrán, dándole enfoque a las mismas, para diferentes usos, entre ellos el apoyar el tema urbano, el medio agrícola y generar electricidad.
La Presa Picachos, con una capacidad estimada de 331 millones de m³, fue concluida en el año 2011 y ha sido utilizada de manera parcial para abastecer una pequeña cantidad de tierras de cultivo, en promedio unas 6,000 hectáreas en el margen del Río Presidio que ya se están fortaleciendo, así mismo, las aguas que contiene dicha presa han estado abasteciendo las necesidades del Puerto de Mazatlán, el plan de trabajo es ampliar la zona agrícola a 22,500 hectáreas en ambos márgenes del Río Presidio.
La Presa Santa María, con capacidad estimada de 850 millones de m³, proyecto que se planea concluir para Diciembre 2023, se encuentra en proceso de construcción con un avance del 92%, aún falta el proceso de prueba, verificar detalles de la obra de toma, desagüe de fondo, piezas especiales, válvulas, etc., considerando todo este proceso para la fecha de entrega previamente mencionada.
La activación de la zona de riego que corresponde a esta presa, que dio inicio en 2022, son en total 24,250 hectáreas, distribuyéndose sobre el margen del Río Baluarte, con una cantidad de 6,236 hectáreas por su margen derecho y 18,014 hectáreas por su margen izquierdo, misma zona agrícola quedará concluida para Abril 2024.
Sin lugar a dudas, una obra sumamente importante que viene además de consolidar el aprovechamiento del uso agrícola, tendrá también otros beneficios, entre ellos el abastecimiento de agua potable a futuro para El Rosario y Escuinapa para uso público urbano, así como la generación hidroeléctrica de la misma.
Con estos dos grandes proyectos se viene a cumplir uno de los propósitos destinados al sector agrícola en el país, siendo esta la reactivación de 1000 hectáreas de riego en su totalidad, correspondiendo a Sinaloa casi el 50% de la cantidad antes mencionada.
La temporada de lluvias no ha sido tan favorable como en la temporada anterior, que alcanzó un máximo registrado en los últimos cinco años, pero se espera que el nivel de recepción de las mismas pueda incrementarse debido a los fenómenos meteorológicos que puedan presentarse.
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