02/04/2024

Revista InfoAgro México

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Maíz forrajero en México

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Sin duda, el maíz es el cultivo más importante de México, por lo que supone para nuestra sociedad, tanto gastronómica como culturalmente. Es necesario señalar que, además de la presencia diaria de este alimento en las mesas de las familias mexicanas, también sirve de sustento a los animales, siendo un excelente forraje para el ganado, particularmente para las vacas lecheras y los animales de tiro. De este modo, se aprovechan para dicho uso todas las partes de la planta de maíz como tallos, hojas y demás partes, en varias etapas del cultivo, principalmente a partir del momento en que aparece la panoja. Además, la producción de maíz forrajero ha ido creciendo durante los últimos años.

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La producción nacional de maíz dedicado a pienso ganadero se ha incrementado durante los últimos años, alcanzando en 2018 una cifra superior a los 17 millones de toneladas. En la gráfica 1 se puede observar una tendencia general de crecimiento desde el año 2009, con la excepción de 2011, donde el volumen de maíz forrajero se redujo con respecto al año anterior. No obstante, desde 2015 el incremento que se ha producido ha sido constante.

El volumen producido en 2018 (17,464,000 toneladas) fue cosechado en una superficie en torno a 600 mil hectáreas, lo que supone un rendimiento promedio de 29.1 toneladas por hectárea. Un dato muy positivo al respecto es que se sembraron 603,000 ha, de las cuales se cosecharon 601,000, es decir, solamente 2,000 no alcanzaron el objetivo como consecuencia de algún siniestro, lo que supone únicamente un 0.3% de pérdida del total de la superficie.

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Gráfica 1. Evolución de la producción nacional de maíz forrajero (en miles de toneladas) entre 2009 y 2018 (SIAP, 2019).

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Gráfica 2. Volumen (en toneladas) de las principales entidades productoras del país (SIAP, 2019).

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 En lo que respecta a la distribución de la producción nacional, ésta se concentra entre los meses de agosto y diciembre, sumando en dichos meses el 93.1% del total. Los mayores niveles de cosecha se producen en octubre (29.2%) y en noviembre (28.3%). La superficie de producción más concentrada se encuentra en Jalisco, considerada la entidad federativa con el hato ganadero más numeroso del país.

      En cuanto a las entidades más productoras dentro del territorio nacional, Jalisco, con más de 6 millones de toneladas, ocupa el primer puesto, con una ventaja clara respecto a los demás estados. Por su parte, Durango (con más 2.5 millones de t) y Zacatecas (con casi 2 millones) ocupan el segundo y tercer lugar, respectivamente. Los principales estados productores de maíz forrajero se exponen en la gráfica 2.

 En términos económicos, según datos oficiales del SIAP, el precio medio de una tonelada de maíz para forraje en 2018 fue de 614 pesos. De este modo, la producción nacional en ese año arrojó una cifra de 10,722,896 pesos anuales. Además, la participación nacional del maíz en la elaboración de forrajes se sitúa en el 14.3%.

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 En lo respecta al producto, este cultivo incluye toda la planta, aprovechándose el tallo, las hojas y demás partes del vegetal, aunque con los granos en estado pastoso, es el más adecuado para usar como forraje, ya que contiene más materia seca y elementos digestibles que cualquier otro cultivo.

      De este modo, puede cosecharse en verde o venderse seco mediante deshidratación. También puede ensilarse, lo que supone guardarlo en silos para que fermente. Este proceso, que puede efectuarse unos tres meses después de la siembra, aumenta su nivel nutritivo, aportando un mayor valor energético, así como más proteínas y sales minerales. Asimismo, es posible hacer maíz molido, al que se le agregan nutrientes para la alimentación integral de los animales.

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Mes

Ene

Feb

Mar

Abr

May

Jun

Jul

Ago

Sep

Oct

Nov

Dic

Imp.

1.9

3.0

11.0

31.8

19.7

6.1

9.0

4.8

2.2

0.0

10.5

0.0

Tabla 1. Distribución mensual (en %) de las importaciones de maíz forrajero en 2018

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La producción del país para forraje cubre, en gran medida, la demanda nacional, aunque en determinadas ocasiones debe recurrirse a la importación para hacer frente a las carencias puntuales o estacionales. A este respecto, el país que nos provee es Estados Unidos, cuya distribución mensual a lo largo del año se refleja en la tabla 1.

El volumen total de maíz forrajero importado en 2018 fue de 70,455 toneladas, que se tradujo en un valor económico de 13.6 millones de dólares. La gráfica 3 muestra la evolución que ha experimentado la cifra anual correspondiente a dicha importación entre los años 2009 y 2018.

Como puede observarse claramente, las cifras económicas de importación han ido oscilando moderadamente en los primeros años de la serie histórica. Lo que sorprende bastante fue el enorme incremento experimentado en 2013 con respecto a 2012. Posteriormente, dichos valores se redujeron de forma considerable, aunque siguieron siendo mucho más elevados que en los años anteriores, a excepción del año 2017.

    Por otra parte, el balance importaciones/exportaciones está claramente decantado por las primeras, ya que las exportaciones son prácticamente inexistentes en un mercado internacional donde los principales protagonistas son Estados Unidos, Brasil y Argentina.

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Gráfica 3. Evolución del valor (en millones de dólares) de las importaciones de maíz para forraje en el periodo 2009-2018 (SIAP, 2019).

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